Intercambia datos con el otro conductor: Es vital que ambos conductores compartan la información de sus licencias de conducir y seguros. Asegúrate de tener también los datos del vehículo (patente, marca) y de la aseguradora del otro conductor.

Llama a una ambulancia o busca atención médica inmediata: Incluso si no sientes dolor en el momento, algunas lesiones pueden manifestarse más tarde. Es fundamental que recibas una evaluación médica para evitar complicaciones futuras.

Involucra a la policía: En caso de que la policía intervenga, también deberás proporcionar tus datos y los del seguro. Es importante contar con un informe oficial que documente el accidente.

Reúne toda la información relevante: Asegúrate de tomar nota del lugar del accidente, las circunstancias, y si es posible, toma fotos del escenario para respaldar tu versión de los hechos.